Miguel Morales

Un proyecto muy particular de Miguel Morales Morín, en la isla de los volcanes, en el municipio de Tinajo. Dos parcelas familiares, Tisalaya y Juan Bello, encontrándose ambas en el Parque Nacional de Timanfaya y el Parque Natural de Los Volcanes. Una tierra donde la cultura del vino es algo muy especial y diferente a cualquier otro lugar. El clima es árido, seco y hace mucho viento, sólo debido a los volcanes puede hacerse vino.

Tisalaya

Un proyecto muy particular de Miguel Morales Morín, en la isla de los volcanes, en el municipio de Tinajo. Dos parcelas familiares, Tisalaya y Juan Bello, de 1,45 hectáreas, a 250 msnm, encontrándose ambas en el Parque Nacional de Timanfaya y el Parque Natural de Los Volcanes. Una tierra donde la cultura del vino es algo muy especial y diferente a cualquier otro lugar. El clima es árido, seco y hace mucho viento, sólo debido a los volcanes puede hacerse vino. La variedad Diego a pie franco es la dominante (95%), con una edad superior a los 60 años y que hunde sus raíces en unos suelos donde reina la roca volcánica y con un horizonte franco-limo-arcilloso cubiertos de ceniza volcánica. Parcelas que mantiene el sistema tradicional de cultivo en hoyos, con un marco de plantación de cuatro por cuatro, conservando de esta forma la singularidad de este viñedo único. El trabajo de la tierra, es mínimo, ya que al estar cubierta por ceniza volcánica, el crecimiento de malas hierbas es nulo y no se necesita ninguna manipulación del suelo. Nuestro compromiso con el terroir es buscar la mayor integración con el ecosistema.

La piel de su uva es muy gruesa y el mosto viscoso, terpénico y de alta acidez, por lo que su elaboración resulta difícil y de rendimiento escaso, pero con carácter muy original, que acentuamos manteniendo el mosto 16 horas en con sus pieles, fermentación espontanea y el vino permanece con sus lías nueve meses como mínimo. Tiene buena aptitud para el envejecimiento en botella.

Queremos expresar nuestro paisaje a través de vinos artesanales, atemporales y de guarda, con una sola filosofía: disfrutar compartiendo momentos.

La Vegueta

Es el proyecto más reciente de Miguel Morales Morín,  con el que busca un perfil de vinos más fresco y frutal, es decir, sin la concentración que caracteria al Tisalaya. Un vino, como su hermano mayor, del municipio de Tinajo. En este caso es un ensamblaje de dos vinos, procedentes de dos variedades, Diego y Malvasía Volcánica, originarias de las parcelas familiares, Juan Bello (0,45Ha) y La Vegueta (0,22Ha), respectivamenteo, encontrándose el primero en el Parque Nacional de Timanfaya y el Parque Natural de los Volcanes y, La Vegueta en el Paisaje Natural de La Geria.

La piel de su uva es muy gruesa y el mosto viscoso, terpénico y de alta acidez, por lo que su elaboración resulta difícil y de rendimiento escaso, pero con carácter muy original, al contrario que la Malvasía Volcánica, de piel fina, mosto más acuoso y traslúcido que el Diego. Para ambas variedades mantenemos el mosto 12 horas en con sus pieles, fermentación espontánea y el vino permanece con sus lías nueve meses como mínimo. 

Queremos expresar nuestro paisaje a través de vinos artesanales, atemporales y de guarda, con una sola filosofía: disfrutar compartiendo momentos.